A los 19 días del mes de marzo de 2020, la alarma sobre la pandemia mundial no es nueva para nadie. Noticias, redes sociales, pláticas con familia, amigos, nos mantienen todo el día hablando de ello. Y no es para menos, es una situación que debe tomarse muy en serio, por lo que de inicio te pedimos que acates todas las reglas que las autoridades apliquen para evitar la propagación de este virus. En nosotros está cortar esa cadena de propagación.
Ello implica, entre otras cosas, la suspensión de actividades públicas y sociales, por ejemplo: ferias, conciertos, ceremonias religiosas, fiestas como bodas, XV años, entre otros muchos eventos.
¿Es una mala noticia? Por supuesto, te lo decimos nosotros, que nuestra fuente de ingresos es precisamente organizar eventos. Pero la prudencia y la responsabilidad debe apremiar ante cualquier interés económico, incluso si ello implica aplazar o suspender graduaciones, exposiciones, cumpleaños y ejemplos de sobra.
¿Qué hago con mi boda, si está programada para estas semanas? ¿Qué dirán los proveedores? ¿Y si nadie asiste? ¿Perderé mi dinero? ¿Y si asiste alguien enfermo? Son claras y obvias preguntas que todos nos haríamos, porque innegablemente tiene que ser aplazada. Sí, fríamente así te lo decimos. Pero también te ofrecemos consejos de qué hacer y cómo hacerlo, mostrando siempre la mejor actitud para afrontar este tipo de circunstancias, recuerda: “En las buenas y en las malas, en la salud y en la enfermedad”.
Estos puntos aplican para novios, xv años, graduaciones y más eventos sociales.
1.- Conserven la calma.
¿Te has fijado que en los carteles de qué hacer en caso de sismo, incendio, contingencia, es la primera indicación? Respirar, agarrarse de las manos, y tomar la decisión es lo primero. Tengamos la confianza que todos saldremos bien de esta, y que en unos meses podrán celebrar su evento como debe ser. Pensar con optimismo les dará fortaleza para sostener este imprevisto, y aceptar que aplazarlo es la mejor decisión para ustedes, sus invitados y para toda la población en general.
2. Contacten a su organizador de la boda.
No es necesario que lo visites. Te aseguro que a través de videollamada por whatsapp, Facebook Messenger, Google duo o sencillamente por teléfono, podrán platicar con tranquilidad. Para este momento te aseguro que ya tienen pensada una estrategia, pues una de las ventajas de contar con un planeador es que los proveedores difícilmente se van a “lavar las manos”, por lo que pide que contacten proveedores y expliquen las evidentes circunstancias sobre la probable suspensión del evento para la fecha prevista. Hasta el momento, las indicaciones de las autoridades (mexicanas) nos anticipan un periodo mínimo de 40 días, hasta de 3 a 4 meses de posible contingencia, es decir, que, si tu fiesta es en marzo, abril o mayo, es un hecho que la pospongas, insistimos, por el bien de todos los que quieres.
3. Si no tienen un organizador, contacten sus proveedores.
Antes de buscarlos, revisa si en los contratos que firmaron existe alguna cláusula de sanción por modificar las fechas, y tómala en cuenta. Contacta tus proveedores y explícales la situación. Como dato extra te comentamos que en la ciudad donde radicamos, el municipio ha cancelado todos los permisos para eventos sociales, por lo que están ambas partes imposibilitadas para el servicio. Busca empatizar con ellos, seguramente comprenderán, y te respetarán el anticipo que ya diste.
4. Decidan.
Las medidas de contingencia no son las mismas en todas las ciudades, por lo que probablemente para ustedes dos aún quede la esperanza de celebrar su boda en tiempo y fecha previstos.
Sin nadie más que ustedes como pareja, platiquen qué decisión tomar.
a) Ignorar los pasos anteriores y arriesgarse a celebrar su boda en fecha y lugar previstos, o
b) ser fuertes y aceptar aplazarla unos meses.
En una hoja de libreta, escriban las consecuencias positivas y negativas, de seguir o de aplazar. Recuerda que la salud de ambos está en riesgo, la de sus familias, seres queridos, así como la de proveedores como meseros, músicos, decoradores, y las familias de todos ellos.
5. Ejecuten.
Tomada la decisión por ustedes dos, contacten nuevamente a su organizador de eventos, o en su defecto a todos los proveedores, y comuniquen la postura que tienen, siendo conscientes de sus ventajas y desventajas.
Si la decisión fue aplazar, muy seguramente los proveedores serán empáticos; prevean una fecha tentativa con el salón, y comuníquenla a todos los demás provisores.
6. Notifiquen.
Si tu wedding planner tiene página web, de Facebook o Instagram, puede hacer un post sobre el aplazamiento de las nupcias, para que todos los invitados se enteren y estén conscientes de la situación. El mismo post lo pueden poner en sus perfiles personales. Las personas que más los quieren, aplaudirán la madurez de tomar esa decisión, y estarán apoyando, para cuando la nueva fecha se acerque.
7. Sonrían.
Tiempos difíciles forjan personas fuertes. Tomar decisiones maduras es otra muestra que están listos para el compromiso del matrimonio. Hagamos todo lo posible para que, en un tiempo, veamos esta adversidad como un obstáculo que pudimos superar.
En Glamour Organizadores valoramos mucho esta complicada elección, por lo que prepararemos contenido agradable que haga más llevadera la espera a ese momento especial.
-RJ